Ciclos de creatividad y conflictividad
Analizaremos las diversas etapas de su vida
junto con los diferentes ciclos astrales, para buscar correlacionarlos y así
indagar entre los “entretelones de la mente”, del compositor.
Veremos cómo la influencia de Neptuno en la Carta Natal de
Puccini, en tensión con la energía simbólica de los planetas involucrados,
potencia luego durante su tránsito, ciertos episodios y acontecimientos importantes de su vida.
Luego de completar sus estudios entre 1867
y 1873, en el seminario de Lucca, y de haber actuado como soprano hasta el
cambio de su voz, en la escuela de música de la Iglesia, se gradúa en
1879, en el Instituto Municipal de su ciudad natal, aportando para su
examen una hermosa Messa di Gloria.
En esos días, Neptuno en tránsito parece estimular el Mercurio natal de la
joven promesa, que representa la expresión sutil y sensible sugiriendo una
fértil imaginación. Una capacidad para escribir sobre asuntos de ficción y toda
tarea que requiera imaginación y
creatividad .
Además
intervienen dos aspectos armónicos importantes brindados por dos planetas
Júpiter y Saturno conocidos como
“cronocractores”, por marcar los tiempos evolutivos del ser humano, ambos
en trígono (120°) respecto a Venus y al
Sol respectivamente, promoviendo el primero “buen gusto, encanto, habilidad
para hacerse popular”, mientras Saturno de traslación más lenta al Sol,
“promoviendo seguridad y responsabilidad, dando habilidad creatividad con
ambición y orgullo”. Pero como toda esa energía debía ser impulsada a los
efectos de una importante transformación, allí estaba Plutón como el “gran
regenerador” haciendo en tránsito una
cuadratura (90°) al Marte natal, buscando estimular la capacidad combativa del
novel compositor.
Esta energía creativa y llena de
oportunidades se ve “coronada” por una beca de la reina Margarita, que le
permite en 1880 trasladarse a Milán para estudiar durante cuatro años en su Conservatorio,
vemos que sus comienzos no podían haber
sido más auspiciosos.
En 1884, cuatro años después, rodeado
durante su estada en Milán de importantes profesores y célebres compositores , logra, con su
cordialidad y buen humor además de sus dotes creativas, una relación ventajosa
para su carrera que lo impulsa a presentar su primera ópera, Le Villi, en
el Teatro dal Verme de Milán, el 31 de mayo de ese año, obteniendo
un importante premio.
Son años muy intensos, donde Saturno toca
en tránsito su Júpiter natal, indicando una energía combinada que genera una
fuerte conducta disciplinada y lo motiva a vencer cualquier obstáculo de tipo
financiero que se le interponga, por ello con sus derechos de autor compra Torre del Lago, una
propiedad rural que sería importante en su vida ; por esos años se conjugan diversas emociones,
algunas impulsadas por un Júpiter en fuerte armonía creativa y mental al Urano
natal, lo que además de su impulso hacia el gusto por la caza de animales
pareciera motivarlo hacia otro tipo de “caza” cuando se enamora de Elvira
Bonturi, la mujer de uno de sus compañeros. Precisamente en ese tiempo Neptuno
y Urano , ambos en armonía a la
Luna natal del compositor, generan por el lado uraniano una
fuerte intuición y deseos de alcanzar logros no demasiado convencionales y por
la influencia de Neptuno, la inspiración para manifestarse a través del arte y
con una clara protección de la llamada “ providencia”.
1884-1892 casi diez años de adormecimiento
creativo, donde Saturno en oposición al Venus Natal imponía un freno a la
creatividad y un enfriamiento afectivo del compositor, mientras Plutón y
Neptuno juntos y en tránsito, generaban un “telón de fondo” a nivel colectivo
de una toma de conciencia, de un “despertar espiritual” de la época, que durará
varios años produciendo en sus comienzos mucha confusión, porque motiva que surja hacia la “superficie
consciente”, aquellas energías sutiles
aprisionadas por el materialismo a través del tiempo.
1892, año en que se decide estrenar su
siguiente ópera Edgar (que venía posponiendo
desde 1889) ahora Júpiter en
Tránsito hacía cuadratura a su Júpiter natal, desatando emociones de escasez,
además Júpiter “tocaba el Neptuno natal”,
lo que impulsaría una fértil imaginación y atracción en la conciencia del
músico, por todo lo intangible.
El 1° de febrero de 1893 estrena su 3°
ópera, Manon Lescaut , en el Teatro Reggio de Turín con gran
éxito el día del estreno, que obligó a Puccini a salir ocho veces a saludar a
un público entusiasta. Saturno en tránsito en armonía con el Júpiter natal,
establecía por un par de años una
energía que propiciaba éxito en los asuntos materiales, una influencia en la
conciencia social de la gente, que lo consideraría importante y de buena
reputación pública.
El 1° de febrero de 1896 llegaría por fin
la consagración del compositor, con el estreno de la obra La Bohéme, en el Teatro
Reggio de Turín, por ese entonces aún se mantenía la influencia de la
conjunción de Neptuno Plutón, ambos en tránsito, marcando una generación de
grandes cambios.
En ese tiempo ambos planetas lentos se
ponían además en clara oposición al Venus natal del músico, generando algunas
formas de fantasías enfermizas, tendencias escapistas y depresiones psíquicas
por parte de Neptuno, mientras que Plutón lo inclinaría hacia una tendencia de
sentimientos explosivos con fuerte deseo de riqueza material e intensa vida emocional, con amores
secretos.
Todo pareciera satisfacer aquellas
características neptunianas, como la fascinación por lo oculto, hasta para
reelaborar partituras y escritos de 50 años atrás, de Henri de Murger , que
había recreado entre 1830-1840 la vida parisina de los artistas, en su
popularísima Scenes de la vie de Bohéme.
El 14 de enero de 1900, estrena Tosca en
el Teatro Costanzi, de Roma; desde lo astral Plutón el gran regenerador está
exactamente junto al Júpiter natal del compositor, de allí la trascendencia
jupiteriana de oportunidad y expansión;
además un doble efecto de Saturno en tránsito junto al Sol natal y en
armonía plena con su Marte natal, por un lado estabilizaba su ambición y
orgullo mientras que por otro lado le imponía un juicio crítico a su energía
emprendedora.
El 17 de febrero del 1904, estrena Madama
Butterfly en la Scala de Milán, un año antes
un episodio conflictivo ponía en serio riesgo la vida del famoso compositor,
cuando Plutón en tránsito, opuesto al Venus Natal mostraba además de
sentimientos explosivos una clara tendencia hacia la inmoralidad sexual, además
Neptuno haciendo oposición exacta a su Sol, indicaba que algo podría
desencadenarse en una situación confusa involucrando a su salud y su vitalidad;
simultáneamente Urano (lo imprevisto) en tránsito se ponía en inarmonía con su
Neptuno, indicando evasivas desconcertantes y tendencias escapistas que
desataron el accidente automovilístico del
25 de febrero de 1903,en que Marte (el disparador) estaba en cuadratura
al Mercurio natal (la mente, la comunicación nerviosa), generando un gran
desequilibrio y confusión; ese mismo día moría -en circunstancias poco
claras- el hasta entonces compañero y
esposo de su pareja Elvira, permitiendo luego formalizar su unión.
En 1907 realiza su primer viaje a Nueva
York para estrenar en el Metropolitan Opera House, la opera mencionada
anteriormente.
En 1909 muere , en circunstancias extrañas
que van del suicidio al asesinato con mercurio,
la empleada doméstica de Puccini, lo que genera una gran conmoción para
la reputación del artista. Mercurio natal, las comunicaciones y el sistema
nervioso-mental, quedaba expuesto a un efecto múltiple, las noticias de la
prensa por un Neptuno que transitaba opuesto y Urano (lo imprevisto) conjunto,
produciéndole al músico gran confusión mental , y una inteligencia perturbada
por las preocupaciones ; confrontando
además la independencia uraniana y la comunicación mercuriana, generando una expresión mental disruptiva.
Por ese año Saturno, el controlador por excelencia, ingresa en la casa 6 de la Carta Natal del
compositor, para inclinarlo a la observación de su salud, inclinándolo hacia un
cambio de hábitos y conductas, tal vez por esos años la tendencia escapista lo incitaba, entre otras cosas, a
fumar en exceso.
En 1910, en el mismo escenario estrena la Fanciulla del West, cuyo
argumento, tal vez habría que decodificarlo como cierta energía de culpa
neptuniana, canalizada por los autores de la obra.
Entre
1910-1917 se abría un paréntesis de elaboración -tal vez- una catarsis, donde
Urano en tránsito había circulado en
oposición a su Luna Natal, estableciendo un claro conflicto entre las
aspiraciones del compositor y las posibilidades de realizarlas, donde la Luna, el simbolismo de la
mujer, estaba presente, como si la imaginación y el talento estuvieran
condicionados.
En agosto de 1917, sube a escena en
Montecarlo, la obra La
Rondine, en ese tiempo Plutón se ponía en fuerte armonía,
en sextil (30°) al Plutón natal, suponiendo un tiempo auspicioso para cierta
regeneración; donde además Júpiter también en armonía al Saturno natal, daba
impulso y fuerza al optimismo, criterio y éxito en asuntos materiales.
En enero de 1921, comienza a componer su
obra inconclusa Turandot, que algunos historiadores adjudican a su excesivo
afán superador y sentido perfeccionista,
en cambio hay razones energéticas que nos muestran la verdadera realidad por la
que atravesaba el compositor.
Por ese tiempo Saturno se ponía en cuadratura primero a su
Venus (el arte y la belleza) y luego a su Sol (la vitalidad) por otro lado
Neptuno “lentamente” se ponía conjunto a su Saturno natal, originándole al
compositor una clara influencia psíquica
destructiva, que lo mantendría dos o tres años
en estado confuso, con depresiones y ansiedades, que en nada ayudaban a
la tarea creativa.
En 1924 viaja a Bruselas para operarse el
24 de noviembre de un tumor diagnosticado en la laringe, si bien la
operación se dice fue un éxito, muere cinco días después por una insuficiencia
cardíaca.
